APENDICITIS AGUDA
La
apendicitis aguda es la inflamación del apéndice, estructura
ubicada en el ciego (porción donde comienza el intestino grueso). La
apendicitis puede ocurrir a cualquier edad, aunque es más frecuente
entre los 10 y los 20 años y está reconocida como una de las causas
más frecuentes de dolor abdominal agudo.
La
causa aceptada del cuadro de apendicitis es la obstrucción del
apéndice, aunque también las infecciones y los tumores pueden
ocasionar un cuadro de apendicitis aguda. Dicha obstrucción
condiciona un aumento de la presión dentro del apéndice, lo cual
origina una congestión vascular que evoluciona a gangrena y
posteriormente a perforación. El proceso inflamatorio provoca un
“escape” de bacterias intestinales, formando pus. Lo cual, aunado
a la perforación, provoca una peritonitis.
El
diagnóstico se basa en la historia clínica y en la exploración
física, complementado con estudios de sangre, orina y radiografías.
En los casos dudosos puede solicitarse un ultrasonido o tomografía
abdominal. La exploración física se basa en la palpación
abdominal.
La
presentación suele comenzar como un dolor repentino localizado en la
mitad inferior del abdomen o en el ombligo, de moderada intensidad y
constante que luego desciende hasta el cuadrante inferior derecho del
abdomen (fosa ilíaca derecha). En el 75% de los casos existe vómito
y fiebre. En algunos casos el dolor puede aumentar con los
movimientos. Si la palpación del abdomen produce una rigidez
involuntaria, se debe sospechar una peritonitis, que es una
emergencia quirúrgica.
La
precisión diagnóstica de la apendicitis suele ser entre el 75-80%
basado en los criterios clínicos. Los diagnósticos diferenciales
incluyen, en orden de frecuencia, la linfadenitis mesentérica,
ausencia de enfermedad, enfermedad pélvica inflamatoria, rotura de
folículo ovárico y gastroenteritis aguda. Otras causas menos
frecuentes de dolor abdominal que pueden confundirse con apendicitis
aguda son el divertículo de Meckel, la infección de vías
urinarias, el cólico renal por cálculos, úlcera péptica
perforada, torsión testicular, pancreatitis, embarazo ectópico,
endometriosis, enfermedad DIVERTICULAR del colon y torsión o ruptura
de un quiste ovárico.
Una
vez diagnosticada la apendicitis aguda, el paciente debe recibir
tratamiento médico y quirúrgico. El manejo médico se hace con
hidratación, aplicación de antibióticos y analgésicos. La cirugía
se conoce con el nombre de apendicectomía y consiste en extirpar el
apéndice afectado, drenar el líquido infectado y lavar la cavidad.
Es
importante recalcar que si la apendicitis no se atiende a tiempo
puede existir una perforación y una peritonitis secundaria. A su
vez, la peritonitis puede llevar a la muerte del paciente. Cuanto más
temprano sea el diagnóstico, mayores serán las probabilidades de
recibir una atención médica adecuada, un mejor pronóstico, menores
molestias y un periodo de convalecencia más corto.
La
mayoría de los pacientes con diagnosticados y tratados oportunamente
se recuperan con facilidad, dependiendo de la edad y condición de
salud previa del paciente. Por lo general la recuperación completa
tarda entre 10 y 28 días.